Sabor Latino

Tortillas calientitas y recién hechas: prepáralas desde la comodidad de tu casa con esta receta

Tortillas calientes y recién hechas para el desayuno, comida o cena. Conoce esta receta y prepara este elemento esencial de la comida mexicana para acompañar cualquier platillo.
jueves, 27 de octubre de 2022 · 16:37

La tortilla es uno de los elementos más representativos de la gastronomía mexicana. Ya sea un taco, en una tostada, en las enchiladas, chilaquiles, quesadillas, tlayudas, huaraches y otro tipo de garnachas, la tortilla y el maíz, está presente en sus decenas de variaciones. Comer con tortilla de maíz es una costumbre muy arraigada dentro de la dieta en México, tanto así, que no muchos pueden comer sólo una. 

El mexicano promedio suele consumir 74 kilogramos de tortilla al año y entre tres y siete diarias. Además de que el 98.6% de los mexicanos consume tortillas, según datos de la empresa Gruma en 2018. 

En pocas palabras, la tortilla es el alimento preferido en este país y aquí te enseñamos a como enamorarte de este elemento gastronómico imprescindible en de la cocina con esta receta fácil y rápida. 

INGREDIENTES 

2 tazas/ 520g de masa fresca. Agua, dependiendo de la que se necesite o

2 tazas/ 260g de masa harina

1 a 1 y 1/4 de taza / 240 a 30o ml de agua

PROCEDIMIENTO

Si vas a usar masa fresca, debe tener una consistencia firme y similar a la de la masa para galletas. Si no la tiene, agrega agua poco a poco, una cucharada cada vez, hasta que la tenga.

Si usas masa harina, mézclala bien en un bol mediano con una taza / 240 ml de agua. Sigue agregando agua, una cucharada cada vez, hasta que tengas una masa suave y densa con una consistencia firme y similar a la masa para hacer galletas.

Haz 12 bolas del tamaño de una pelota de golf y cúbrelas con un trapo húmedo para que no se sequen.

Calienta a fuego medio un comal o una sartén sin engrasar.

Coloca una de las láminas de plástico en la base de la torteadora y pon arriba una bola de masa. Cúbrela con la otra lámina de plástico y prénsala bien para que se aplaste entre los dos platos de la torteadora, como si fuera un sándwich. Debe quedar con un grosor de unos 3 milímetros.

Abre la torteadora y retira la masa aplastada que estará pegada a ambas láminas de plástico. Colócala en la palma de la mano izquierda (si eres diestro) y usa la derecha para retirar la lámina superior. Dale la vuelta y pásala a la mano derecha. Con mucha delicadeza, retira la lámina de plástico.

Con cuidado, coloca la tortilla cruda en el comal o sartén ya caliente. Debe rías escuchar un crepitar muy suave en cuanto entre en contacto con el metal. Una vez el borde de la tortilla se vuelva opaco, significará que se está cocinando. En cuanto esto suceda (después de unos 30 o 45 segundos), voltéala y deja que se cocine durante 30 o 45 segundos más, hasta que toda la tortilla esté opaca. Voltéala de nuevo para que se cocine otros 30 segundos. Tras la segunda vuelta, debería empezar a hincharse un poco.

Esto significa que el agua que hay dentro de la masa se ha evaporado y la tortilla está lista.

A veces hay que hacer algunos ajustes hasta controlar la técnica. Si los bordes de la tortilla tienen un aspecto harinoso, agrega una cucharada de agua a la masa y masajea con cuidado. Pero no agregues demasiada o se pegara al plástico o a la sartén. Procura que la tortilla no salga demasiado fina y que tenga un grosor uniforme, lo cual ayuda a voltearlas. Es posible que tengas que ajustar también el fuego para que no se cocinen ni demasiado rápido ni demasiado despacio.

Una vez tengas la humedad y la temperatura bajo control, para cocinar una tortilla necesitarás un total de dos minutos. A partir de este momento, deberías poder presionar y cocinar dos tortillas a la vez en el mismo comal o en dos sartenes.

Una vez la tortilla está cocinada, pásala a un cesto o a un bol profundo y cubre con un trapo para mantener el calor a medida que las vas apilando. Si las envuelves bien, en el cesto o en una caja con tapa, se mantendrán calientes durante una hora aproximadamente.

Se pueden volver a calentar en el comal o en la sartén, volteándolas varias veces hasta que estén listas. No pasa nada si se tuestan un poco. Esto aportará más sabor. También es posible volver a calentar varias tortillas a la vez. Se empieza con una: una vez la volteas, pon otra encima de la que ya está caliente. Pasados 30 segundos, voltéalas a la vez para que la parte fría de la segunda esté en contacto con la superficie del comal o la sartén y coloca una tercera tortilla arriba del todo. Continúa volteando y agregando tortillas hasta que tengas todas las que necesitas. Puedes agregar tantas como quieras. Una vez juntas, se darán
 calor las unas a las otras.

Receta extraída de 'Mi cocina de Ciudad de México. Recetas y Convicciones' de Gabriela Cámara, Neo-Cook 2020.