Así lo hacen los profesionales
Cuál es el secreto de chefs premiados para conservar verduras y frutas frescas por más tiempo
El refrigerador ofrece distintos métodos para obtener alimentos más frescos que antes, sin perder su color y sabor.Luego de realizar las compras del día es usual que nos sobren algunos productos que son guardados dentro del refrigerador. Sin embargo, cuando se trata de las verduras, resulta un poco más costoso mantenerlas frescas por un tiempo. Pues a pesar de mantenerlas dentro del refrigerador, pueden marchitarse y perder el color en unos pocos días, pero si aplicas este truco sencillo podrás ralentizar este proceso.
Las verduras son los productos más difíciles de mantener en condiciones iniciales, pues al contacto del aire fresco del refrigerador pierde su esencia. Sin embargo, muchas personas optan por consumirlas por más que se vean marchitas pero, en realidad, ponen en peligro su salud por la presencia de algunas bacterias nocivas. Si no deseas estar en esta situación, te recomendamos seguir algún que otro truco para no desperdiciar su calidad.
¿Cómo mantener frescas las verduras?
Hidratación adecuada:
Para el primer truco lo que debes tener en cuenta, es la estructura natural de algunas verduras, porque requieren de ambientes húmedos. Por lo tanto, antes de ingresarlas al refrigerador debes colocarlas en bolsas de plástico para que generen agua y se hidraten al interior. Sin embargo, debes tener en cuenta que el agua se cambia todos los días o, de lo contrario, esta se pudrirá.
Separar las frutas:
Otro truco que se puede implementar es separar las frutas y verduras en distintos espacios al interior del refrigerador. Esta consiste en evitar que los productos alimenticios tengan contacto entre ellos, porque cada uno cuenta con distintos procesos de marchitamiento y maduración. Así ninguno de ellos correrá el riesgo de que se pudran y surjan bacterias.
Envases transpirables:
Como último truco, te recomendamos utilizar envases transpirables para las verduras, sean bolsas de plástico o papel. Una vez que los obtengas, realiza unos agujeros para que el aire ingrese y no se acumulen cantidades de humedad al estar en el refrigerador. De esta forma estos productos no entrarán en un estado de descomposición ni se marchitarán.