Estudios Científicos
A qué velocidad debes caminar para reducir el riesgo de diabetes, según expertos
¿Caminas rápido o lento? Un nuevo estudio señala que caminar a cierta velocidad puede disminuir significativamente el riesgo de padecer diabetes tipo 2.La diabetes es una de las enfermedades más comunes alrededor del mundo, de acuerdo con datos de la revista científica The Lancet más de medio billón de personas viven con diabetes en todo el mundo, cifras que incluyen hombres, mujeres, niñas y niños.
La diabetes tipo 2 es la más común, sin embargo, un estudio recientemente publicado en la revista British Journal of Sports Medicine reveló que el caminar reduce significativamente el riesgo de padecer Diabetes tipo 2.
El estudio fue llevado a cabo por Ahmad Jayedi, del Centro de Investigación sobre Determinantes Sociales de la Salud de la Universidad de Ciencias Médicas de Semnan en Irán, quien compartió:
"Estudios anteriores han indicado que caminar con frecuencia se asociaba con un menor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en la población general, de manera que aquellos que pasaban más tiempo caminando por día tenían un riesgo menor".
Los datos señalados por Ahmad Jayedi señalaron que existe un vínculo entre la velocidad al caminar y el desarrollo de diabetes tipo 2 en adultos de Estados Unidos, Reino Unido y Japón; pues las pruebas cronometradas que realizaron los participantes en un periodo de 8 años sugirieron que aquellas personas que caminaban a un ritmo promedio o normal tenían 15% menos probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2.

Las personas que caminaron a un ritmo más rápido tuvieron un riesgo del 24%, en tanto que las personas que caminaron muy rápido o dando zancadas alcanzaron el 39%.
La caminata fácil se definió como en 3.2 km por hora, el ritmo promedio fue de 3.2 a 4.8 km por hora. El ritmo rápido fue de 4.8 a 6.4 kilómetros por hora y la caminata más rápida de 6.4 km por hora.
De acuerdo con Robert Gabbay, director de la Asociación Estadounidense de Diabetes, entrevistado por CBS News, que el caminar más rápido sea benéfico para la salud no es sorprendente, pero sí lo es la capacidad de los investigadores para cuantificar la velocidad de la caminata e incorporarla a su estudio.