Secreto de juventud
El secreto japonés para pausar el envejecimiento y obtener más energía de juventud
Al poner en práctica este método milenario, tendrás la posibilidad de lucir una piel con más descanso y en mejor estado.
En el mundo coexisten miles de culturas diversas que se destacan por sus prácticas y creencias que son muy particulares, sobre todo en Japón. Así también, se proponen responder a los problemas relacionados con la salud del cuerpo y su estado. Sobre este último, existe una práctica conocida cómo el método de Inemuri que ayuda a detener el proceso de envejecimiento con ayuda de un buen descanso.
El envejecimiento suele ser una etapa donde emergen los problemas de salud, principalmente el físico y mental. Es por esto que muchos proponen ralentizar este proceso con ayuda de fármacos o una alimentación balanceada, las cuales no suelen mostrar resultados importantes. En este sentido, el país nipón propone practicar el método del Inemuri que consiste en tomar un descanso profundo y reparador.
¿Cómo poner en práctica el Inemuri?
Para frenar el proceso de envejecimiento, el Inemuri afirma tener la respuesta para resguardar el cuidado de la piel. De acuerdo con esto, lo importante es irse a dormir o llevar adelante un descanso que nos sirva para realizar las siguientes actividades del día siguiente. En base a esto, es importante comprender que esta práctica está al servicio de aquellos que padecen de un aspecto poco favorable para su personalidad.
Según el Inemuri, el descanso es fundamental no sólo para ralentizar el paso al envejecimiento sino contar con la fuerza necesaria para comenzar el día siguiente. Esta consiste en tomar unas pequeñas siestas sea en el lugar que uno se encuentre, como el trabajo y el transporte público. Sin embargo, antes de seguir con esto, se debe tener muy en cuenta que mucho de esta práctica depende del nivel de concentración que muestra la persona.
Para el Inemuri, el descanso ideal no existe sino que se adapta en base a la persona, desde 1 hora a sólo 5 minutos. Por otro lado, esta práctica propone una serie de reglas a cumplir para alcanzar una siesta reparadora y que ayude a ralentizar el proceso del envejecimiento. La más principal, es promover un sueño en otros espacios poco probables cómo el trabajo, que ayuda a incrementar la productividad laboral.
