Jardinería
Aprende a cultivar berenjena paso a paso y descubre cuándo es la mejor época para hacerlo, cuidados y riesgos
Aprende a cultivar berenjena paso a paso, descubre cuándo es la mejor época para hacerlo, todas sus características y los riesgos que puede presentar de la siembra a la cosecha.Aprende a cultivar berenjenas en tu huerto o jardín. Esta hortaliza de la familia de las solanáceas es muy apreciada por su sabor y sus propiedades nutricionales. Además, es una planta que se adapta bien a diferentes climas y suelos, siempre que tenga suficiente sol y humedad. Conoce cómo cultivar berenjena paso a paso, desde la siembra hasta la cosecha, así como los cuidados que necesita y los posibles problemas que puede presentar. También te contamos cuándo es la mejor época para cultivarla y todas las características sobre la berenjena que debes conocer.
¿Qué es la berenjena y qué beneficios tiene?
La berenjena (Solanum melongena) es una planta herbácea anual que pertenece a la familia de las solanáceas, como el tomate, el pimiento o la patata. Su origen se sitúa en Asia, donde se cultiva desde hace más de 4 mil años. Se introdujo en Europa por los árabes en la Edad Media y desde entonces se ha extendido por todo el mundo.
La parte comestible de la berenjena es el fruto, que tiene forma ovalada o alargada, piel lisa y brillante y color morado, negro, blanco o verde, según la variedad. La pulpa es blanca o amarillenta, con muchas semillas pequeñas y blandas. El fruto se cosecha cuando está tierno, antes de que madure y se vuelva amargo.
La berenjena tiene un alto contenido en agua (más del 90%) y pocas calorías (unas 25 por cada 100 gramos). Es rica en fibra, vitaminas (A, C, B1, B2, B3, B6 y ácido fólico) y minerales (potasio, magnesio, calcio, fósforo, hierro y zinc). También contiene antioxidantes como la antocianina, que le da el color morado, y otros compuestos beneficiosos para la salud como la solanina, la nicotina o la nasunina.
Entre las propiedades de la berenjena destacan:
- Ayuda a regular el tránsito intestinal y a prevenir el estreñimiento.
- Favorece la eliminación de líquidos y toxinas del organismo.
- Tiene efecto diurético y depurativo.
- Reduce los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre.
- Protege el hígado y la vesícula biliar.
- Mejora la circulación sanguínea y previene la hipertensión arterial.
- Refuerza el sistema inmunológico y previene las infecciones.
- Tiene acción antiinflamatoria y analgésica.
- Previene el envejecimiento celular y el estrés oxidativo.
- Contribuye a prevenir el cáncer y otras enfermedades degenerativas.
¿Cuándo se siembra la berenjena?
La berenjena es una planta de clima cálido que necesita una temperatura mínima de 15°C para germinar y de 20°C para crecer y fructificar. Por eso, se suele sembrar a finales del invierno o principios de la primavera, cuando ya no hay riesgo de heladas. En zonas con inviernos suaves se puede adelantar la siembra a finales del otoño o principios del invierno.
La forma más habitual de sembrar la berenjena es en semillero protegido, ya sea en bandejas de alvéolos o en macetas pequeñas con sustrato universal. Se colocan dos o tres semillas por alvéolo o maceta y se cubren con una capa fina de sustrato. Se riega con cuidado para no desplazar las semillas y se mantiene el semillero húmedo pero sin encharcar. Se coloca el semillero en un lugar cálido y luminoso, pero sin sol directo. La germinación suele tardar entre 10 y 20 días.
Cuando las plántulas tienen unas cuatro hojas verdaderas se trasplantan al lugar definitivo, ya sea en el huerto o en macetas grandes (de unos 30 cm de diámetro como mínimo). Se debe elegir un sitio soleado, con un suelo fértil, suelto y bien drenado. Se deja una distancia de unos 40 cm entre plantas y de unos 60 cm entre hileras. Se riega bien después del trasplante y se aplica un acolchado orgánico para conservar la humedad y evitar las malas hierbas.
¿Cómo se cuida la berenjena?
La berenjena es una planta que requiere unos cuidados básicos para obtener una buena cosecha. Estos son los principales:
1.- Riego: la berenjena necesita un riego regular y abundante, sobre todo en verano, cuando hace más calor y la planta está en plena producción. Se debe evitar el encharcamiento y el riego por aspersión, que puede favorecer la aparición de hongos. Lo mejor es regar por goteo o por surcos, procurando no mojar las hojas ni los frutos. Se puede aprovechar el agua de lluvia o de riego para regar la berenjena, siempre que no esté muy fría.
2.- Abono: la berenjena es una planta exigente en nutrientes, sobre todo en nitrógeno, fósforo y potasio. Se recomienda aplicar un abono orgánico como el compost, el humus de lombriz o el estiércol bien descompuesto antes de la siembra o el trasplante, y luego cada 15 o 20 días durante el cultivo. También se puede usar un abono líquido como el té de compost o el purín de ortiga, diluido en agua, cada 10 o 15 días.
3.- Poda: la berenjena no necesita una poda muy intensa, solo se deben eliminar las hojas secas, enfermas o dañadas, así como los brotes laterales que salen de la base del tallo principal. Esto ayuda a mejorar la ventilación y la iluminación de la planta, y a concentrar la energía en los frutos. También se puede despuntar el ápice de la planta cuando tiene unos 60 cm de altura, para favorecer el desarrollo de las ramas laterales y la producción de frutos.
Tutorado: la berenjena es una planta que puede alcanzar hasta 1 metro de altura y que produce frutos pesados que pueden hacer que se doble o se rompa el tallo. Por eso, se recomienda colocar un tutor o soporte junto a cada planta, como una caña, una estaca o una malla, y atar el tallo con cuidado a medida que crece. Esto evita que la planta se caiga o se dañe por el viento o el peso de los frutos.
Recolección: Se cosecha cuando el fruto está tierno, antes de que madure y se vuelva amargo. Esto suele ocurrir entre 60 y 90 días después del trasplante, según la variedad. Se debe cortar el fruto con un cuchillo o unas tijeras, dejando un trozo de tallo. Se debe usar guantes para protegerse de las espinas que tiene la planta en el tallo y las hojas. Los frutos se pueden conservar durante unas dos semanas en un lugar fresco y seco.
¿Qué problemas puede tener la berenjena?
La berenjena es una planta bastante resistente que no suele presentar muchos problemas si se le dan los cuidados adecuados. Sin embargo, puede verse afectada por algunas plagas y enfermedades que conviene prevenir y controlar. Estas son las más comunes:
Pulgones: son unos insectos pequeños y verdes que se alimentan de la savia de las hojas y los brotes jóvenes. Pueden transmitir virus y debilitar la planta. Se pueden combatir con insecticidas naturales como el jabón potásico, el aceite de neem o el ajo.
Mosca blanca: son unos insectos blancos que también se alimentan de la savia y producen una sustancia pegajosa llamada melaza que favorece la aparición de hongos como el negrillo. Se pueden controlar con trampas cromáticas amarillas o con insecticidas naturales como los mencionados para los pulgones.
Araña roja: son unos ácaros diminutos y rojos que se instalan en el envés de las hojas y las puntean con manchas amarillas.