Crème brûlée casero: prepara este delicio postre europeo y descubre de su increíble sabor

La crème brûlée es un postre tradicional francés, muy parecido a la crema catalana, que consiste en una crema de leche, huevos, azúcar y vainilla, cubierta por una capa de caramelo crujiente. Es un postre muy sencillo de preparar y que sorprenderá a tus invitados por su delicadeza y sabor. Aquí te explicamos cómo hacerlo paso a paso.

Ingredientes (para 3 personas)

• 4 yemas de huevo
• 300 ml de leche entera
• 200 ml de nata líquida para cocinar al 35% de MG
• 1/2 vaina de vainilla
• 60 g de azúcar
• Ralladura o cáscara de 1 limón
• Azúcar para espolvorear y quemar

Preparación

1. Precalienta el horno a 160 ºC y coloca una bandeja con dos dedos de agua en su interior. Esta será la base para hacer el baño maría.

2. Pon la leche y la nata en un cazo a fuego medio-bajo y añade las semillas de la vaina de vainilla y la propia vaina abierta. También agrega la ralladura o la cáscara de limón. Calienta la mezcla hasta que casi hierva, pero sin dejar que llegue a hervir. Retira del fuego y deja infusionar durante 5 minutos. Luego, retira la cáscara de limón y la vaina de vainilla.

3. En un bol, bate las yemas con el azúcar y una pizca de sal hasta obtener una crema espumosa y blanquecina.

4. Vierte la leche infusionada sobre las yemas poco a poco, sin dejar de remover con unas varillas, hasta integrar bien todos los ingredientes.

5. Vuelve a poner la crema en el cazo y cocínala a fuego medio durante unos 5 minutos, sin parar de remover, hasta que espese ligeramente. Verás que cambia de textura, de líquida a cremosa.

6. Reparte la crema en unos recipientes individuales cerámicos y colócalos dentro de la bandeja con agua caliente que tienes en el horno. Hornea durante 25 o 30 minutos, hasta que la crema esté cuajada pero todavía tiemble un poco en el centro.

7. Saca los recipientes del horno y deja que se enfríen a temperatura ambiente. Luego, refrigéralos durante al menos 2 horas o hasta que estén bien fríos.

8. Antes de servir, espolvorea azúcar sobre cada recipiente, cubriendo bien toda la superficie. Quema el azúcar con un soplete de cocina o una pala especial para caramelizar, hasta formar una capa dorada y crujiente. Disfruta de tu crème brûlée casera y fácil, un postre delicioso que te transportará a Francia.