Así debes lavar tu almohada para que quede libre de ácaros

Lavar las almohadas es tan importante cómo hacer el cambio de sábanas y fundas en la cama, ya que en ellas se acumulan ácaros, polvo y otros agentes alérgenos que pueden desencadenar problemas respiratorios como el asma y la congestión nasal, además de otros problemas dermatológicos como el acné.

¿Cada cuándo se debe lavar las almohadas?

Lo recomendable es lavar las almohadas al menos de 4 a 5 veces al año. Sin embargo, debes de tomar en cuenta el material del que están hechas y las recomendaciones en la etiqueta, pues dependiendo de ello puede variar la limpieza que necesiten.  

¿Cómo saber si tengo ácaros en mis almohadas?

Los ácaros no se pueden observar a simple vista, pero puedes darte cuenta de su presencia cuando tienes reacciones alérgicas al dormir. Una forma muy fácil de saber si tienes ácaros es colocando sobre la superficie de tu almohada o colchón un pañuelo y frotarlo suavemente, si notas partículas negras o manchas oscuras es que definitivamente están ahí, ya que así lucen las heces de los ácaros.

¿Cómo lavar de forma correcta las almohadas?

A continuación te compartimos cómo lavar las almohadas de forma correcta.

Lavado de almohadas con fibras sintéticas.

• Retira las fundas de las almohadas para lavarlas por separado.
• En caso de que tus almohadas presenten manchas de cualquier tipo puedes añadir un spray antimanchas en la zona afectada u optar por utilizar vinagre.
• Agrega a tu lavadora suficiente agua para cubrir las almohadas, y añade jabón líquido y suavizante antes de iniciar el ciclo. Se recomienda no lavar más de dos almohadas por ciclo para evitar que tu lavadora se descomponga por el esfuerzo.
• Si tienes posibilidad de añadir agua caliente al lavado,  opta por lavarlas de este modo y dar un enjuague más del habitual, para asegurarte de que no quede con restos de detergente.
• Finaliza el lavado centrifugando la ropa de tu lavadora o secando al sol directamente. De esta forma evitarás que tus almohadas queden con humedad y acabarás con los ácaros.

Lavado de almohadas de plumas

Si tienes almohadas de plumas, se recomienda cuidar la limpieza de estas con un cambio y lavado habitual de fundas. Además, puedes hacer lavados en seco colocando un poco de bicarbonato de sodio sobre la superficie de las almohadas y dejando actuarlo por un par de horas, al final aspira la superficie.

Con estos dos tips puedes reducir el lavado profesional de las almohadas a 1 o 2 veces al año, y evitar que los ácaros se acumulen en ellas.