Cómo preparar una mezcla casera para dejar las chanclas como nuevas con solo 3 ingredientes

Hay calzados que se usan más durante una cierta época del año y esto se debe a que son mucho más cómodos y nuestro pie estará más libre; como son el caso de las chanclas, que son abiertos y generalmente es utilizado durante el verano o cuando las temperaturas son altas. Esto nos permite tener nuestro pie al aire libre y que no transpire, aunque se pueden ensuciar y para eliminar la suciedad de las chanclas no será para nada sencillo. Por eso, vamos a compartir el paso a paso de esta mezcla con pocos ingredientes para dejarlas como nuevas.

Las chanclas son un tipo de sandalia que se caracterizan por sostener al pie por medio de una tira o cordón que separa el dedo gordo del pie del resto de los dedos. Son muy utilizadas durante el verano, aunque si la temperatura acompaña, se la usa en primavera y otoño. Lo que seguro desconocías es que pueden ensuciarse y volverse totalmente negras, lo que es un serio problema.

Debido al sudor de nuestros pies, las chanclas tomarán un color negro y también se debe a si hemos pisado alguna superficie sucia como barro o arena; lo que hará imposible usarlas de nuevo. Antes de que salgas al mercado a comprar unas nuevas, hay un método mucho más efectivo para dejarlas totalmente relucientes y que una usuaria compartió en su cuenta de Instagram.

Lo único que necesitas para dejar las chanclas como nuevas son tres ingredientes que seguramente tienes en tu hogar y estamos hablando de una jarra con agua, antigrasa para cocina y un cepillo para limpiar. La elaboración de esta mezcla es muy sencilla y en primer lugar vas a tener que llenar la jarra al tope con agua y verterlas para que la suciedad se vaya ablandando, ya que será muy difícil dejarlas blancas.

El siguiente paso para limpiar las chanclas es colocarlas sobre una superficie plana y rociar con el antigrasa de cocina dejando que actúe por varios minutos y de manera inmediata, tienes que ponerte a fregar con el cepillo para eliminar toda la suciedad que puede estar acumulada. El último paso consiste en enjuagar con agua y ya quedarán relucientes. Lo puedes repetir con todas las chanclas que tengas en tu hogar.