Con solo 2 ingredientes, prepara un abono casero para que tu geranio estalle de flores en diciembre

El geranio es una de las plantas más versátiles y bellas para decorar espacios. Es uno de los ejemplares que resiste el calor y la sequía. Pero también soporta el daño de las plagas de insectos y las enfermedades que estos pueden causar. Estos factores la convierten en un ser vivo apto para principiantes en jardinería.

Sin embargo, al igual que otras plantas, puede necesitar nutrientes suministrados a través de abonos. Para que el ejemplar crezca de forma saludable, hay que garantizar su riego, luz solar, drenaje y suelo adecuados. Conoce cómo preparar un fertilizante casero natural para los geranios.

¿Cómo hacer un fertilizante casero para geranios?

Hacer un abono casero para los geranios no es complicado. Los nutrientes que necesita esta planta, pueden ser aportados por las cáscaras de huevo y los posos de café. El truco consiste en combinar estos elementos naturales que siempre terminan en la basura.

De esta manera, se les da un segundo uso y la planta puede aprovechar el nitrógeno y el calcio necesario para fortalecer sus tallos y raíces. Además, se puede acelerar la floración con un crecimiento vigoroso y saludable.

Los 3 pasos para hacer un abono casero para geranios

1. Pulverizar las cáscaras limpias y secas de 3 huevos, hasta conseguir un polvo fino.
2. Mezclar este polvo con 1 cucharada de posos de café o café soluble. 
3. Aplicar este abono casero en polvo alrededor de la base de la planta. En este paso es crucial enterrar un poco la mezcla en el sustrato.

Este fertilizante natural se puede aplicar de manera mensual durante primavera y verano. Pero en los meses de otoño e invierno, puede aplicarse cada mes y medio o dos. De esta manera, la planta podrá absorber los nutrientes de manera gradual con cada riego.