La edad es cuestión de actitud
Cuáles son los 3 malos hábitos que debes abandonar para evitar el envejecimiento prematuro
De acuerdo con un estudio científico, estas son algunas prácticas comunes que pueden acelerar nuestro envejecimiento.El envejecimiento del cuerpo es un proceso de la vida que le sucede a cualquier persona, como la aparición de las canas o la baja en las defensas de nuestra salud. En este último, lo que más ocurre es que contamos con menos probabilidades de enfrentar cualquier enfermedad que ingrese al organismo. Sin embargo, un estudio científico comprobó que la llegada a la vejez puede acelerarse por la presencia de malos hábitos.
Es sabido que el envejecimiento no llega de la misma forma que en los demás, porque dependen de varios factores. Un ejemplo claro es la alimentación, los ejercicios y nuestra forma de vivir, las cuales influyen en gran parte del estado del cuerpo humano. En este sentido, para que gocemos de una mejor salud por más tiempo, lo ideal es dejar de lado los 3 malos hábitos que podrían contribuir con una repentina vejez.
¿Cuáles son los 3 malos hábitos?
Bajo consumo de proteínas:
Para poner en tela de juicio el primero de los malos hábitos, varios especialistas coinciden en que el consumo de proteínas fortalece la salud muscular. De acuerdo con esta afirmación, señalan que al incorporar alimentos como huevos, salmón o carnes rojas, es la ideal para bajar de peso y resulta muy útil en cualquier edad. En caso de no consumir la cantidad necesaria, es posible que la masa muscular disminuya progresivamente, sobre todo en el período del envejecimiento.
Beber poca cantidad de agua:
En cuanto al segundo de los malos hábitos, se afirma que las personas que están en el período de envejecimiento sufren una mayor deshidratación. La explicación de esto se debe porque con el paso de los años, en comparación con los más jóvenes, las personas mayores no sienten la sensación de sed, debido a que esta disminuye. Para que nuestra salud esté en buenas condiciones, lo recomendable es beber entre 2 y 3 litros de agua diarios.

Comer a cualquier hora:
Para el último de los malos hábitos que debemos dejar de lado, es muy importante tener en cuenta la forma en que nos alimentamos, según el horario. Es decir, al comer con frecuencia y en deshoras podrían ocasionar un repentino incremento del peso corporal que termina por afectar a nuestra salud. Como consecuencia extra, se pueden producir episodios de insomnio que terminan por deteriorar el nivel cognitivo y acelerar el envejecimiento.