Cómo se prepara el abono de sólo 2 ingredientes que es el truco de jardineros para obtener flores hermosas y gigantes

Las plantas y las flores suelen ser cultivadas en el jardín o en las entradas de casa para darle un aspecto más decorativo. Por lo general, este efecto se puede evidenciar en la primavera donde varias especies polinizadoras y el clima cálido favorecen su crecimiento. En este sentido, nuestro rol no puede quedarse de lado, pues con ayuda del siguiente abono casero lograremos hacer que aparezcan en grandes cantidades.

Quienes saben de jardinería reconocen que el mantenimiento de las flores y las plantas suele requerir de mucha inversión de dinero y tiempo. Por ejemplo, es usual que surjan problemas relacionados con el tratamiento de plagas que azotan el estado del jardín, lo cual requiere de insecticidas químicos que pueden ocasionar otras secuelas. Lo cierto es que en esta oportunidad, te enseñamos a preparar un abono casero que es ideal para el crecimiento de nuestros cultivos.

¿De qué se trata este abono casero?

En algún momento de nuestras vidas hemos soñando con ver plantas y flores que estallen alrededor de la casa, lo cual le brinda un toque más ornamental en comparación con otras viviendas. Por fantasioso que parezca, esto es posible gracias a una preparación sencilla que consta de dos ingredientes claves para formar un poderoso abono casero. Incluso es considerado como una opción alternativa que te permitirá ahorrar sin gastar en otros productos de jardinería.

De acuerdo con varios especialistas en el tema, el uso de un abono casero para tratar el crecimiento de las plantas y flores es mucho más efectivo que cualquier otra opción conocida. Incluso, al estar hechos a base de ingredientes orgánicos, como los restos de verduras, cáscaras de huevos y saquitos de té o café, proveen micronutrientes capaces de hacerlos florecer en grandes cantidades. Para que esto sea posible, existe un tipo de abono hecho de productos conocidos, las lentejas y el arroz.

Ingredientes:

• Medio litro de agua
• Arroz
• Lentejas

Para iniciar con la preparación de este sencillo abono casero, lo que haremos será dejar reposar un puñado de lentejas en un recipiente con medio litro de agua, al igual que el arroz, por 48 horas. Pasado este tiempo, dividimos los líquidos de las semillas con un colador, el cual los vamos a mezclar y llevar dentro de un rociador. Finalmente, lo aplicamos sobre las plantas y las flores durante las primeras horas de la mañana o por las tardes, pero este proceso debe repetirse al menos cada 15 días.