Truco para tu hogar
¿Dónde guardar los huevos para que conserven todas sus propiedades?
Refrigera los huevos en casa para preservar su frescura y evitar riesgos de contaminación.
Aunque en muchos supermercados los huevos se exhiben a temperatura ambiente, una vez que los llevas a casa, es fundamental que los almacenes en la nevera. Este simple acto puede marcar la diferencia entre un huevo fresco y uno que se ha deteriorado, además de reducir significativamente los riesgos de contaminación.
La cáscara del huevo, aunque parece resistente, es en realidad muy porosa. Estas pequeñas aberturas, que pueden variar entre 7,000 y 15,000 por huevo, permiten el intercambio de gases entre el interior y el exterior, lo que es vital para la calidad del huevo. Sin embargo, esta porosidad también hace que el huevo sea vulnerable a la entrada de bacterias y otros patógenos, especialmente si no se maneja correctamente. Por eso, mantenerlos en frío ayuda a protegerlos.
Un aspecto importante que muchos ignoran es la forma en que los huevos se almacenan en la nevera. Aunque los refrigeradores suelen tener un espacio destinado a los huevos en la puerta, este es, de hecho, el peor lugar para guardarlos.
Este es el mejor lugar para colocar los huevos
La puerta de la nevera está constantemente expuesta a cambios de temperatura cada vez que se abre, lo que puede afectar la calidad del huevo. Es preferible colocarlos en una balda central o superior, donde la temperatura es más constante y no corren riesgo de congelarse o recibir humedad de otros alimentos.
La situación varía de un país a otro. En España y la mayor parte de Europa, los huevos se venden a temperatura ambiente para evitar fluctuaciones térmicas que podrían dañarlos. Sin embargo, en países como Estados Unidos, Canadá o Japón, los huevos se refrigeran en los comercios porque se lavan antes de ser vendidos, eliminando su capa protectora natural. Esto requiere que se mantengan siempre en frío para prevenir la proliferación de bacterias como la salmonela.
Independientemente de dónde vivas, una vez que lleves los huevos a casa, refrigéralos de inmediato. Esto no solo preservará su frescura por más tiempo, sino que también protegerá tu salud y la de tu familia al reducir el riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos.
