La forma correcta
Cómo se debe cocinar el spaghetti según chefs italianos, ¿se debe o no añadir aceite y sal al agua?
Conseguir las mejores pastas se encuentra en un truco gastronómico muy ingenioso. Toma nota de ello.Cuando se acerca el momento ideal para compartir una comida familiar, la receta más elegida son las pastas. Dado que pueden prepararse de forma casera o ser compradas, lo más característico es su facilidad para ser cocinadas en gran cantidad y en poco tiempo. Sin embargo, un problema recurrente se produce cuando el spaghetti suele pegarse a la olla o entre sí.
Sin lugar a dudas, la gran mayoría de las personas prefiere comer pastas debido a su fácil preparación, además de acompañar la receta con una salsa especial. Debido a su versatilidad y combinación de sabores, las variedades de su preparación se adaptan a todos los gustos. Entre los más preferidos se encuentra el spaghetti, porque constituye una pieza clave para la pasta perfecta.
¿Cuál es la forma correcta de cocinar el spaghetti?
Cocinar las pastas perfectas existen de varias formas, pero sólo algunas muestran resultados asombrosos. Sin embargo, ciertas prácticas como añadir aceite y sal dentro de la olla con agua, generan debates acerca de sus resultados finales, que se reflejan en una receta correcta o un procedimiento equivocado. En el caso del spaghetti, la respuesta final se oculta entre las opiniones de la ciencia y la gastronomía profesional.
La técnica de añadir aceite y sal al agua con el spaghetti suele implementarse con el objetivo de evitar que cada hilo logre cocinarse sin pegarse a las demás. En ese sentido, tanto los expertos en cocina como los científicos desaconsejan su uso, al considerarse un desperdicio de ingredientes. Según argumentan, la cocción de las pastas suele irse hacia el fondo de la olla, mientras que el aceite se queda en la superficie, caso similar a la sal que no le suma sabor a la receta.
Si lo que buscamos es evitar que la receta de pastas no se adhieran entre sí, lo importante es tomar atención a los litros de agua utilizados en la preparación. Por lo general, la regla dictamina un litro de agua cada 100 gramos de spaghetti, y así logre cocinarse de manera uniforme. A su vez, es recomendable agregarlos una vez que el agua comience a hervir porque, además de no pegarse, acelera su proceso de cocción.