Estas son las 5 frases que nunca le debes decir a un niño, según la psicología

Ser padre en tiempos donde la tecnología está presente no es nada sencillo, teniendo en cuenta que hay que saber educarlos e inculcarles todos los valores posibles. A su vez, hay que tener cuidado con lo que le podemos transmitir porque puede desalentarlos o ponerlos tristes y en base a esto, la psicología se encargó de explicar cuáles son esas cinco frases que jamás debes decirle a tus hijos y los efectos que pueden causar en el niño,

Todas aquellas personas que estén a cargo del cuidado de niños, ya sea padres o adultos, deben saber que es fundamental cuidar el vocabulario o el uso de determinadas palabras que pueden causar un efecto adverso. De acuerdo a lo explicado por la psicología, los niños absorben todo lo que los adultos dicen, en especial cómo les hace sentir quienes ayudan a formarlos. Por eso, hay frases que deben evitar decirse mientras son pequeños.

Por más que haya algunas frases que tienen buenas intenciones, los expertos recomiendan no decirlas para no dañar su autoestima y la primera de ellas es “Ya va a pasar” y esto significa que va a desestimar los sentimientos y que siempre tienen que preguntar por todo aquello que les genere ansiedad o inquietud. Otra frase que también hay que evitar decir es: “No puedo jugar” y es que el juego es algo fundamental para ellos y para la relación entre ambos.

Otra frase que la psicología recomienda no decirle a los niños es: “Basta de llorar” y es que esto se puede interpretar como un desinterés por las emociones de los hijos, por lo que hay que reconocer sus sentimientos y validarlos, donde notarán que uno está interesado en lo que les sucede. La cuarta frase que no debes decir nunca es: “No puedes” y para eso, hay que motivarlos siempre y animarlos a tener una mentalidad de crecimiento.

La última frase que la psicología recomienda no decir nunca porque tiene efectos negativos en el niño es: “Lo único que quiero es que seas feliz”, ya que generará mucha presión sobre los más chicos y termina siendo una carga para ellos; ya que no se puede estar feliz todo el tiempo y eso llevará a que bajen el nivel de estrés.