Con solo 2 ingredientes, así puedes eliminar las manchas de óxido de las baldosas

Tener baldosas en el hogar puede ser muy lindo y es que le aportan un estilo diferente al suelo, sumado a que podemos encontrarnos con muchos diseños; pero si no las limpiamos, irán perdiendo su color característico, se romperán y hasta aparecerá el óxido. Por eso, debemos hacer una limpieza exhaustiva para evitar que aparezcan manchas de óxido y en lugar de gastar dinero en productos costosos, lo mejor es preparar un limpiador casero con tan solo dos ingredientes.

La oxidación es un grave problema; sobre todo en aquellas superficies que están en contacto permanente con el aire y que lleva a que pierda su color característico. Esta reacción química se produce cuando las baldosas entran en contacto con una sustancia oxidante; o también por el agua causada por la lluvia o una pérdida. Una vez que el óxido se apodera de la baldosa, adoptará un color marrón.

El óxido en las baldosas se pueden observar fácilmente en las juntas negras y si bien son un problema común, es muy antiestético y no quedará para nada bien. Estas se oxidarán producto de la suciedad, la humedad constante y el moho. Para prevenir esta oxidación debemos garantizar una buena ventilación, una limpieza regular, utilizar un sellador y el secado. Pero, en caso de que ya se encuentre presente, hay dos ingredientes que deberás combinar.

Cuáles son los 2 ingredientes para eliminar el óxido en las baldosas

Deja de gastar dinero en artículos de limpieza que no son efectivos; y para sacar el óxido de las baldosas podrás combinar dos ingredientes de cocina que son perfectos para dejarlas relucientes y brillantes nuevamente. En este caso, hablamos del bicarbonato de sodio y del vinagre blanco, considerados como los mejores aliados para la limpieza.

Para poder eliminar el óxido de las baldosas, deberás mezclar estos dos ingredientes hasta obtener una pasta y luego tendrás que aplicarla sobre las manchas y dejar que actúe por varios minutos. Luego, tendrás que fregar con un cepillo y finalmente fregar y enjuagar; notarás así que van quedando relucientes y limpias.