Limpieza
Elimina la grasa de tu vajilla con 1 cucharadita de estos 3 ingredientes comunes en tu cocina
La creatividad sigue avanzando a pasos agigantados, y hoy en día podemos encontrar en el mercado soluciones cada vez más inteligentes
Cuando la limpieza y la creatividad se convierten en aliados, nada puede salir mal. Y justamente las nuevas tendencias que se han popularizado en particular dejan solucionado el problema de la grasa en la vajilla, un aspecto que dice presente en varias casas. Es que hay varias ideas que ahora ayuda a eliminarlas de una forma muy sencilla y nos hace olvidar este dolor de cabeza con sencillos ingredientes.
La limpieza de la vajilla ha experimentado una transformación radical con los nuevos inventos que se generan. La creatividad sigue avanzando a pasos agigantados, y hoy en día podemos encontrar en el mercado soluciones cada vez más inteligentes y eficientes. Es el caso de este truco para eliminar la grasa de tu vajilla con 1 cucharadita de estos 3 ingredientes comunes en tu cocina.
La limpieza de la vajilla
El primer paso en la limpieza es dejar que la plancha se enfríe por completo para evitar quemaduras. Luego, espolvorea sal gruesa sobre la superficie fría y frota con un paño limpio o una esponja. La sal actuará como un abrasivo suave, eliminando la grasa sin dañar el revestimiento de la plancha. Para la grasa más persistente, el vinagre blanco es tu mejor aliado. Moja un paño con vinagre y frota la superficie. Si la grasa está muy pegada, puedes calentar ligeramente la plancha a baja temperatura, aplicar vinagre y dejar actuar unos minutos antes de limpiar.
Si aún quedan residuos difíciles de eliminar en la limpieza, prepara una pasta espesa mezclando bicarbonato de sodio con agua. Aplica la pasta sobre las áreas problemáticas y deja actuar unos minutos antes de frotar con una esponja o un paño suave. No olvides limpiar los bordes y ranuras de la plancha, donde suele acumularse suciedad. Usa un cepillo de cerdas suaves o un palillo de madera para llegar a esas áreas difíciles.
Una vez que hayas eliminado todos los restos de grasa y suciedad en la limpieza, seca la plancha con un paño limpio. Si quieres darle un acabado brillante y proteger la superficie, puedes aplicar una pequeña cantidad de aceite de cocina con un paño limpio. ¡Tu plancha estará como nueva, lista para dejar tu ropa impecable!
