Cocina
El rollo de papel es cosa de abuelas; esta es la tendencia ecológica y económica
¡Adiós al desperdicio! La tendencia que está transformando la limpieza de la cocina y cuidando el planeta.El rollo de papel cocina se ha consolidado como la herramienta de limpieza por excelencia en la cocina debido a que en cuestión de segundos puedes olvidarte de las manchas de suciedad o el exceso de grasa en tus alimentos. Sin embargo, el uso desmedido que se tiene de este material desechable tiene un impacto negativo en el medio ambiente. Es por ello que cada vez más dejan atrás a las toallas de cocina desechables para volver a un clásico, que se consolida como una tendencia ecológica y económica. Hablamos de los trapos de cocina.
Los trapos de cocina, también conocidos como repasadores de tela, son una opción más amable con el medio ambiente y con el bolsillo. Aquí te compartimos qué debes tomar en cuenta al momento de elegir esta herramienta de limpieza.

Los trapos de cocina son la tendencia ecológica y económica en la limpieza de la cocina
Los trapos o repasadores de cocina, a diferencia del rollo de papel, son una opción de limpieza reutilizable, versátil y amigable con el medio ambiente.
- Pueden lavarse y reutilizarse una y otra vez, reduciendo así la basura que generas y cuidando del medio ambiente.
- Aunque al inicio puedes invertir una gran suma de dinero, son una opción más económica, pues gastarás menos que si compras toallas de papel para tu cocina mes a mes.
- Además, debido a que los encuentras en diferentes colores puedes destinar cada uno para diferentes tareas, desde limpiar superficies, secar trastes, etc.

Eso sí, hay que decir que para que sean una opción sostenible y saludable, hay que lavarlos con frecuencia, pues de lo contrario pueden convertirse en un cultivo de gérmenes y bacterias.
Si te cuesta hacer la transición de las toallas de papel a los trapos de cocina, puedes utilizar ambos. Elige los primeras para absorber la grasa de tus alimentos o limpiar manchas difíciles o contaminantes como el huevo, el líquido que dejan las carnes crudas, entre otras; y la segunda opción para secarte las manos, limpiar frutas o trastes.