Cómo utilizar el bicarbonato de sodio para eliminar los insectos de tus plantas en pocos minutos

El bicarbonato de sodio es un ingrediente que sirve para muchas tareas en el hogar. Así es como puede ser parte de recetas de pastelería o ser un elemento neutralizador de la acidez de ciertos alimentos o preparaciones. Pero también se utiliza para procedimientos de limpieza profundos.

Sin embargo, lo que muchas personas no saben es que el bicarbonato de sodio se puede aplicar en las plantas para eliminar insectos invasivos que pueden acabar marchitando los ejemplares del jardín. Conoce de qué se trata su acción y cuál es la manera adecuada de aplicarlo.

¿Por qué cada vez más gente utiliza el bicarbonato de sodio en las plantas para eliminar insectos?

Según los expertos, el bicarbonato de sodio favorece la salud integral de las plantas y las mantiene libres de plagas de insectos y enfermedades. Estas son sus principales ventajas:

• Altera el pH de la superficie de las hojas y crea un entorno menos favorable para el desarrollo de hongos como el mildiu o el oídio (manchas blancas o polvosas en hojas y tallos).
• Regula el pH del sustrato y evita que se vuelva demasiado ácido. En este último caso, la planta no puede absorber correctamente los nutrientes.
• Disminuye la presencia de insectos como pulgones y cochinillas. Estos se alimentan de la savia y debilitan a la planta.
• Neutraliza los olores y las bacterias en la tierra en las macetas que poseen plantas de riego frecuente o sin buen drenaje.

¿Cómo aplicar el bicarbonato de sodio en las plantas para prevenir plagas de insectos?

Hacer un repelente de plagas de insectos con bicarbonato de sodio para colocar en las plantas es sencillo. Solo hace falta conseguir los siguientes ingredientes:

• 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
• 1 litro de agua
• 2 gotitas de jabón líquido neutro

Luego de mezclar los tres ingredientes mencionados, se debe colocar esta solución en un envase con pulverizador. Posteriormente, hay que aplicar el repelente sobre las hojas de las plantas, pero evitando los brotes jóvenes y las flores. Según los expertos en jardinería, este procedimiento se puede hacer 1 vez por semana, preferiblemente en horas sin exposición directa al sol.

Pero otra forma de aplicar el bicarbonato de sodio en las plantas es a través de una pequeña cantidad espolvoreada directamente sobre la superficie del sustrato, es decir, alrededor del tallo. De esta manera, se estará previniendo la aparición de hongos en la base del ejemplar vegetal.