Medio Ambiente

Gusanos come plástico: científicos encuentran larvas capaces de degradarlo

Los gusanos come plástico son capaces de degradar el polietileno con su propia saliva. ¿Cómo lo hacen?
viernes, 7 de octubre de 2022 · 20:58

El plástico es uno de los componentes de mayor relevancia para la contaminación mundial. El ser humano ha tratado de buscar alternativas que ayuden a la disminución de este polímero, pero un estudio reciente reveló que la solución podría estar en un pequeño insecto. Científicos descubrieron que la baba de los gusanos de cera puede degradar y descomponer las bolsas de plástico

La saliva de este animal contiene dos tipos de encimas que pueden degradar el polietileno a temperatura ambiente. Este material se encuentra en el plástico y representa alrededor del 30% de la producción total en una amplia gama de materiales comúnmente contaminantes, sumamente resistentes ante la descomposición. 

¿Cómo surgió? 

El descubrimiento se produjo después de que una científica descubriera a un grupo de larvas que comenzó a hacer agujeros en las bolsas de basura, hechas de plástico

Federica Bertocchini, investigadora del Centro de Investigaciones Biológicas (CIB-CSIC), quien dirige el estudio desde 2017, encontró un panal de abejas lleno de gusanos de cera, decidió quitarlos y colocarlos en una bolsa de plástico. Cuando regresó estaban por todas partes; los pequeños insectos devoradores escaparon de la bolsa aún cuando estaba cerrada: 

“Solo había una explicación: los gusanos habían hecho los agujeros y se habían escapado por ahí. En ese momento empezó este proyecto”, dijo la investigadora. 

CÉSAR HERNÁNDEZ, CSIC

El nuevo descubrimiento 

Desde hace cinco años se dio a conocer este hallazgo, pero ahora los expertos encontraron una explicación mucho más avanzada para este fenómeno. 

El trabajo demostró que el polímero puede degradarse después de varias horas de exponerse a las enzimas que posee la saliva de estas larvas

"Lo que pensamos es que las enzimas son capaces de realizar una versión acelerada de la meteorización del polietileno", afirmó el doctor Clemente Arias, coautor del estudio y miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España, a través de la BBC

“Para degradar el plástico es necesario que el oxígeno penetre en el polímero, explicó Bertocchini. "Este primer paso de oxidación, que normalmente es resultado de la exposición a la luz solar o a altas temperaturas, es un cuello de botella que ralentiza la degradación de plásticos como el polietileno, uno de los más resistentes”. 

“Ahora hemos descubierto que las enzimas de la saliva del gusano de cera realizan este paso crucial: oxidan el plástico. Así, permiten superar el cuello de botella de la degradación del plástico y acelerar su descomposición”, añadió. 

Durante todo es tiempo, el grupo español del CSIC realizó varios experimentos para comprar la eficacia de estos gusanos al biodegradar estos plásticos. Según la directora de este estudio, 100 ejemplares pueden degradar 92 miligramos de polietileno en 12 horas, un proceso "realmente muy rápido", según Bertocchini

Otros estudios relacionados 

Estas pruebas determinaron que las larvas del lepidóptero 'Galleria mellonella', conocido como gusano de la cera, son de los insectos que degradan el plástico más rápido. También se han encontrado a otros gusanos del mismo género capaces de sintetizar el polietileno y el poliestierno

Otro estudio encontró que algunas bacterias en los océanos y suelos de todo le mundo podría estar "evolucionando" para degradar el plástico. Al rededor de 30 mil enzimas diferentes pueden degradar 10 tipos de plástico.

En 2020 una super enzima fue descubierta. Es capaz de descomponer botellas de plástico hechas de PET. Científicos se inspiraron en un error encontrado en un basurero de Japón, que después se modificó accidentalmente para aumentar su potencia. También se encontró otra enzima expuesta en la bacterias de una composta de hojas, y un insecto que en un basurero que puede comer poliuretano.

Respecto al estudio del CSIC aún hay mucho por descubrir. Bertocchini y su equipo pretenden indagar en este mecanismo de degradación enzimática y profundizar en él para encontrar más respuestas.