USA

Se cumplen 53 años de la llegada del primer hombre a la luna (1969)

Neil Armstrong, Edwin E. Aladrin y Michael Collins fueron los primeros hombres en llegar a la luna gracias al proyecto Apolo de la NASA. USA estaba en la cima de la carrera espacial frente a los soviéticos.
miércoles, 20 de julio de 2022 · 13:28

“Un pequeño paso para el hombre y un gran salto para la humanidad”, dijo Neil Armstrong al momento de pisar la luna, seis horas y media después de haber alunizado. El 20 de julio de 1969 a las 02:56 (hora internacional UTC), el Apolo 11 se convirtió en la primera misión tripulada de la historia en lograr que un ser humano llegara a la luna. Con esta hazaña, Estados Unidos se posicionó en el primer lugar dentro de la carrera espacial frente a la Unión Soviética. 

La tripulación del Apolo 11 contó con la participación del comandante, Neil A. Armstrong de 38 años, Edwin E. Aladrin Jr. de 39 y Michael Collins de 38. Los primeros hombres en llegar a la luna, el astro que ronda el planeta tierra. Como dato curioso, el proyecto APOLO de la NASA involucró a más de 400 mil personas, mientras que solo un equipo de no más de 30 personas se encontraron el centro de control mientras Armstrong dijo sus famosas palabras. 

Los peligros del trayecto: no todo fue miel sobre hojuelas.

Según el podcast, ‘13 Minutos a la Luna’ de la BBC, el viaje contó con muchos inconvenientes durante su trayecto. 

La comunicación llegó a ser nula, pues la gente en el mando de control perdía la señal con los tres tripulantes desde la tierra y ellos en el espacio también. El hecho de no poder mantener contacto con los astronautas implicó no poder realizar el alunizaje, por lo que la tensión se elevó. 

Una vez resueltos los problemas de comunicación, los límites de velocidad para poder aterrizar fueron sobrepasados. El guía de vuelo, Steve Bales se enfrentó a este gran contratiempo, ya que la nave del Apolo 11 viajó más rápido de lo que debería al momento de entrar a la órbita lunar. Llegar a cierta velocidad implicaba que los tres tuvieran que abortar la misión, sin embargo lograron controlar este detalle. 

Para su mala suerte, la computadora también comenzó a fallar. Lo que era en su momento el dispositivo más avanzado dentro de la nave, hoy cuenta con la tecnología de una calculadora de bolsillo. 

 "Si se consideran las interconexiones, confiabilidad, resistencia y documentación, la computadora de guía Apolo es al menos tan impresionante como la PC en tu escritorio", escribió el profesor en aeronáutica y astronáutica del MIT David A. Mindell en el libro 'Apolo digital'. 

Un extraño código apareció en la pantalla “1202”, en primera instancia los tripulantes no sabían de qué se trataba, pero la extraña alarma que sonó cinco veces durante 15 minutos solo quería decir que la computadora estaba sobrecargada de tareas. Gracias al equipo de programadores de la MIT, aún la computadora estuviera cargada, esta priorizaría las tareas más esenciales, como lo son la velocidad y localización para no poner en riesgo el alunizaje. 

Por último otro inconveniente se presentó. La localidad de la luna a la que el Apolo 11 llegó fue llamada como “el mar de la tranquilidad”, pero este mar de tranquilidad se convirtió en un cráter de más de 30 metros de diámetro con rocas igual de grandes que las de un automóvil. El lugar era el menos adecuado para aterrizar, por lo que Armstrong decidió cambiar el piloto automático y tomar el control de la nave. Esto trajo consigo la posible pérdida de combustible, ya que el proyecto estaba parametrizado con una gran exactitud, lo que hacía de todos los datos y suministros algo preciso conforme a trayectoria y aterrizaje. El combustible era uno de esos elementos cruciales y Neil forzó la máquina para poder aterrizar en el lugar más adecuado. 

A menos de 10 segundos de colocar la nave en la luna, el tiempo se hizo eterno. Y con ello, el módulo lunar logró aterrizar en el mar de la tranquilidad el 20 de julio de 1969 a las 20:17:39 UT. 

 

Más de