Día de Darwin

Conoce a Antoinette Blackwell, la mujer que denució el machismo de Charles Darwin en su obra 'El Orígen del Hombre'

Conoce la historia de Antoinette Brown Blackwell, activista y estudiosa estadounidense, que cuestionó las conclusiones del científico evolutivo Charles Darwin y denunció el machismo en su libro 'El Orígen del Hombre'
domingo, 12 de febrero de 2023 · 10:00

Antoinette Brown Blackwell se convirtió en la primera mujer ordenada ministra protestante en los Estados Unidos, pero también la pioneras del feminismo y estudiosa que cuestionó las conclusiones del del naturalsita y científico evolutivo más famoso de la historia, Charles Darwin, en uno de sus trabajos más famosos 'El Orígen de Hombre'. 

Blackwell nació el 20 de mayo de 1825 y fue la menor de siete hermanos de una familia ubicada en Henrietta, Nueva York. Aún con una gran capacidad intelectual y en una época donde el sistema de aprendizaja favorecía a los hombres, la joven se abrió paso al estudio a través de su vinculación a la iglesia congregacional, donde trató de obtener un grado de teología en el Oberlin College de Ohio. Logró completar los cursos, pero nunca se le otorgó un título que reconociera sus estudios por ser mujer. 

Fue una activista, pensadora y oradora nata, cuyas preocupaciones más frecuentes eran el abolicionismo de la esclavitud y los derechos de las mujeres, el sufragio femenino, el acceso de las mujeres a los trabajos liderados por hombres, etc. Sus controvertida posturas la llevaron a tener acaloradas discusiones con otras pioneras del feminismo, por lo que se apartó por un tiempo de la conferencias y se inclinó hacia la escritura. 

Fue en ese proceso que se interesó por el darwinismo social que nació de la obra de Darwin y Herbert Spencer. En 1869, diez años después de la publicación de este escrito, Blackwell le envió un ejemplar de su primer libro, 'Studies in General Science'. A lo que Darwin le respondió esto en una carta. 

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Estimado señor:

Agradezco mucho la amabilidad que ha tenido de enviarme su libro "Estudios en Ciencia General". En el prefacio observo que ha invertido mucho tiempo en el mismo. Al pasar las páginas noto que usted cita afirmaciones mías que son muy poco conocidas.

Atentamente,

Charles Darwin 

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El padre de la teoría evolutiva correspondió con una amable carta de agradecimiento; la cual, sin embargo, encabezó con un “Dear Sir” o "Estimado señor", ignorando y sin imaginar que su inteligente corresponsal, que firmaba como A. B. Blackwell, podía ser una mujer.  

No hay registros que revelen si Blackwell dio mayor importancia a este error, pero todo cambio cuando el estudioso británico publicó 'El origen del hombre' en 1871. Antoinette se sintió indignada ante el tratamiento del científico respecto al género y al sexo, puesto que se refería a la mujer en un nivel intermedio entre el niño y el hombre. “Si se hicieran dos listas de los más eminentes hombres y mujeres en poesía, pintura, escultura, música —incluyendo composición e interpretación—, historia, ciencia y filosofía… las dos listas no tendrían comparación”, escribió. 

De acuerdo con los escritos de Darwin, los machos u hombres habían engendrado paciencia y perseverencia en la competición por las hembras en las especies inferiores a lo largo de la evolución, lo que de alguna manera hacía referencia a la superioridad del género maculino sobre la mujer. Mientras tanto, Spencer alegó que el trabajo femenino era egoísta, ya que perjudicaba la reproducción de la especie. 

Durante cuatro años, Blackwell analizó estas asveraciones y publicó en 1875 el escrito 'The Sexes Throughout Nature', una colección de ensayos en donde postuló que Darwin había cometido un error al explicar la teoría evolutiva desde una perspectiva masculina. “Solo una mujer puede acercarse a la materia desde un punto de vista femenino; y entre nosotras no hay sino principiantes en esta clase de investigaciones”, redactó. 

Blackwell concluyó que las diferencias entre ambos sexos se igualaban por la fuerza de la evolución biológica: “En conjunto, los machos y hembras de la misma especie, desde el molusco hasta el hombre, pueden continuar su evolución relacionada, como verdaderos equivalentes, en todas las modalidades de fuerza, física y psíquica”.

La palabra de Antoinette no fue siempre validada, pero logró convencer de que la obra de Darwin postulaba un sesgo masculino apartada del rigor científico. 

Con información de la BBC y Javier Yanes.