Estudios científicos

Científicos descubren microbios capaces de digerir plástico a bajas temperaturas

Un grupo de científicos puso a prueba distintas cepas de microbios y hongos para analizar su capacidad de degradación de plásticos y descubribieron que la mayoría era capaz de hacerlo a bajas temperaturas, diferencia marcada frente a otros tipos que también pueden hacerlo.
viernes, 19 de mayo de 2023 · 19:50

Científicos descubren microbios capaces de digerir plásticos a bajas temperaturas, un descubrimiento útil ante la creciente emergencia climática y una opción viable para el reciclaje. 

Aunque muchos microorganismos anteriormente descubiertos son capaces de hacerlo, por lo general pueden realizar esta tarea a temperaturas superiores a los 30 grados centígrados. Eso no sólo significa que su uso para la degradación industrializada de millones de toneladas de desperdicios sería exhorbitantemente caro, sino que no es neutro en carbono. 

Científicos del Instituto Federal Suizo WSL descubrieron un grupo de microbios que pueden hacer esta tarea pero a 15 grados centígrados, lo que podría suponer un gran avance en el reciclaje microbiano.

De acuerdo con los hallazgos publicados en la revista Frontiers in Microbiology, el Dr. Joel Rüthi, del WSL, y sus colegas tomaron muestras de 19 cepas de bacterias y 15 tipos hongos que crecían en plásticos libres o enterrados intencionadamente en el suelo durante un año en zonas como Groenlandia, Svalbard y Suiza. Los expertos dejaron que los microbios crecieran en cultivos de una sola cepa en un laboratorio a oscuras y con una temperatura de 15 grados centígrados.  

Los resultados, publicados en la revista Frontiers in Microbiology,  mostraron que las cepas bacterianas pertenecían a 13 géneros de los filos actinobacteria y proteobacteria, y los hongos a 10 géneros de los filos ascomycota y mucoromycota.

Entre los plásticos utilizados para este experimento están el polietileno (PE) no biodegradable y el poliéster-poliuretano (PUR) biodegradable, así como dos mezclas biodegradables comercialmente disponibles de tereftalato de adipato de polibutileno (PBAT) y ácido poliláctico (PLA).

Ninguna de las cepas fue capaz de digerir el PE, ni si quiera después de 126 días de incubación con estos plásticos. Sin embargo, otras 19 cepas, que representan el 56% de ellas, incluidas las de 11 hongos y ocho bacterias, fueron capaces de digerir el PUR a 15 grados; otros 14 hongos y tres bacterias digirieron el PBAT y el PLA

"Aquí demostramos que nuevos taxones microbianos obtenidos de la 'plastisfera' de suelos alpinos y árticos fueron capaces de descomponer plásticos biodegradables a 15 grados centígrados. Estos organismos podrían ayudar a reducir los costes y la carga medioambiental de un proceso de reciclado enzimático del plástico", comentó Rüthi

El experto dijo que era realmente sorprendente que una gran parte de estos microbios puediera degradar al menos uno de los plásticos utilizados en la prueba. 

Los plásticos comenzaron a utilizarse ampliamente desde la década de 1950, lo que ha generado millones de toneladas de desperdicios derivados que tardan siglos en degradarse por sí solos. Los microbios pueden degradar los polímeros porque se parecen a algunas estructuras que se encuentran en las células vegetales.

El Dr. Beat Frey, uno de los autores del estudio, explicó: "Se ha demostrado que los microbios producen una amplia variedad de enzimas degradadoras de polímeros que intervienen en la descomposición de las paredes celulares de las plantas. En particular, los hongos fitopatógenos suelen biodegradar poliésteres, por su capacidad de producir cutinasas, que se dirigen a los polímeros plásticos por su parecido con la cutina del polímero vegetal".

Los científicos sólo probaron que los microbios degradan estos plásticos a una cierta temperatura, por lo que aún no han encontrado la más adecuada. No obstante, dicen que funciona bien entre 4 y 20 grados centígrados.

Frey afirmó: "El próximo gran reto será identificar las enzimas que degradan el plástico producidas por las cepas microbianas y optimizar el proceso para obtener grandes cantidades de proteínas. Además, podría ser necesaria una mayor modificación de las enzimas para optimizar propiedades como la estabilidad de las proteínas". 

Con información de The Guardian