Las canas serán solo un recuerdo con estas mechas invertidas que serán tendencia esta temporada

En el mundo de la coloración y estilismo del cabello, la naturalidad es una tendencia que llegó para quedarse. Así es como muchas personas han apostado a métodos no tan agresivos para ocultar o disimular sus canas. Uno de ellos se traduce en las mechas invertidas. Conoce de qué se trata este estilo y por qué consigue cada vez más adeptos.

¿En qué consisten las mechas invertidas para disimular canas?

Según los expertos en coloración y estilismo del cabello, las mechas invertidas se logran oscureciendo la melena de medios a puntas, como si fuera un barrido de color, pero dejando las raíces más claras. En otras palabras: en vez de concentrar los puntos de luz entre la zona media del pelo y las puntas (balayage o babylights), se mantiene la luz en la raíz. De esta manera, medios y puntas se van oscureciendo gradualmente.

Las mechas invertidas son perfectas para disimular las canas mucho más tiempo y son ideales para las personas de pelo fino o con poco volumen. Es un tipo de coloración que se sugiere a gente que quiere integrar sus pelo canoso sin tener que teñirse de manera total. 

El resultado de este estilo es un estilo con mucha más luz en el rostro y un aspecto juvenil y fresco. Estas mechas van bien con cualquier tipo de melena (ya que no es una técnica muy agresiva) y no necesitan un gran mantenimiento. Los expertos aseguran que duran mucho más, ya que se consiguen tonos más naturales.

¿Cómo mantener las mechas invertidas por más tiempo?

Este tipo de coloración del cabello permite estar sin nuevo tinte por más tiempo. Esto se debe a la profundidad que se produce en la melena con la mezcla de tonos claros y oscuros. Para mantener el tono de las mechas invertidas por más tiempo es necesario conservar la hidratación del pelo. 

Al igual que sucede con otros tintes o coloraciones (como el balayage o las mechas babylights), cuanto más nutrido e hidratado esté el cabello con las mechas invertidas, mejor se apreciará el color. Para mantener hidratada la melena solo hay que lavarla con agua tibia y evitar productos capilares con sulfatos. Además, los expertos recomiendan utilizar una mascarilla hidratante 1 vez por semana.

Por otro lado, también es importante disponer de un buen acondicionador. Este producto debe sellar bien la cutícula en cada lavado y se puede combinar y potenciar con un tratamiento antioxidante tipo mascarilla.