Las estanterías de metal en la ducha son cosa de abuelas: la tendencia en baños ultra funcional

Cuando la decoración del hogar y la creatividad se convierten en aliados, nada puede salir mal. Y justamente el nuevo truco que se ha popularizado en particular deja solucionado el problema de la molesta estantería de metal en la ducha, un aspecto que dice presente en prácticamente todas las casas. Es que hay varias alternativas que ahora ayudan a reemplazarlas de una forma muy sencilla y nos hace olvidar este dolor de cabeza.

La decoración de la casa ha experimentado una transformación radical con los nuevos inventos que se generan. La creatividad sigue avanzando a pasos agigantados, y hoy en día podemos encontrar en el mercado soluciones cada vez más inteligentes y eficientes. Es el caso de esta nueva tendencia en baños ultra funcional que deja a las estanterías de metal en la ducha como cosa de abuelas.

La decoración de la ducha

La organización en la ducha ha evolucionado, dejando atrás las tradicionales estanterías metálicas que a menudo resultan poco estéticas y propensas a la oxidación. En su lugar, los especialistas en decoración proponen una solución elegante y funcional: crear huecos en la pared de la ducha. Estos nichos empotrados ofrecen un espacio de almacenamiento discreto y personalizado, que se integra perfectamente con el diseño del baño.

La creación de estos huecos se realiza durante la construcción o reforma del baño, utilizando materiales resistentes a la humedad como el pladur hidrófugo o el microcemento. La profundidad y el tamaño de los nichos pueden variar según las necesidades y preferencias de cada persona, permitiendo almacenar desde botellas de champú y gel de ducha hasta jabones y esponjas. Además, se pueden incorporar luces LED en el interior de los nichos para crear una decoración más acogedora y relajante.

Una de las principales ventajas de esta solución es que no ocupa espacio adicional en la ducha, lo que resulta especialmente útil en baños pequeños, además de la decoración. Al estar integrados en la pared, los nichos no interfieren con el movimiento y contribuyen a crear una sensación de amplitud y orden. Además, al no tener que preocuparse por la limpieza de estanterías metálicas, el mantenimiento de la ducha se vuelve más sencillo.