Peluquería
El flequillo es cosa del pasado: la tendencia en corte de cabello para mujeres +30
El cuidado de la belleza a través de la peluquería ha experimentado una transformación radical
Cuando la peluquería y la creatividad se convierten en aliados, nada puede salir mal. Y justamente una nueva fórmula que se ha popularizado en el mundo de la belleza deja solucionado el problema de tener siempre estilo con flequillo, una situación que suele decir presente en prácticamente todas las mujeres. Es que hay simples alternativas con otros cortes que han lucir a las quienes tienen más de 30 años.
El cuidado de la belleza a través de la peluquería ha experimentado una transformación radical con las nuevas tendencias que se generan. La creatividad sigue avanzando a pasos agigantados, y hoy en día podemos encontrar en el mercado opciones cada vez más inteligentes y eficientes. Es el caso del esta tendencia en corte de cabello para mujeres +30 que deja al flequillo como cosa del pasado.
El nuevo corte de peluquería
El bob desmechado se posiciona como una de las opciones favoritas para reemplazar al flequillo en la peluquería. Este corte, a la altura de la mandíbula o ligeramente más largo, se caracteriza por sus capas sutiles y puntas desfiladas. Aporta volumen y movimiento al cabello, sin necesidad de dedicar mucho tiempo al peinado. Es perfecto para mujeres con cabello fino o medio que buscan un look desenfadado y moderno.
Para quienes prefieren mantener el largo, el corte en capas largas es una excelente alternativa de peluquería. Las capas suaves y bien definidas crean movimiento y textura, evitando que el cabello se vea pesado o sin vida. Este corte es muy versátil, ya que permite crear diversos estilos, desde ondas sueltas hasta recogidos elegantes. Además, favorece a todo tipo de rostros y texturas de cabello.
Para las más atrevidas con la peluquería, el pixie moderno y el mullet suave son opciones que marcan la diferencia. El pixie, en su versión más actual, se caracteriza por sus capas texturizadas y asimétricas, que aportan un toque de rebeldía y sofisticación. Por otro lado, el mullet suave es una reinterpretación del clásico mullet, con capas más sutiles y un acabado más pulido. Ambos cortes requieren un buen estilista para lograr el equilibrio perfecto entre audacia y elegancia.
