Biología y Paleontología

La clave de nuestra propia evolución: encuentran el corazón de un pez primitivo de hace 380 millones de años

Se trata de una animal de hace más de 380 millones de años. Un punto de partida para el estudio de la evolución humana.
martes, 20 de septiembre de 2022 · 18:01

Un grupo de científicos encontró el corazón fosilizado más antiguo jamás encontrado hasta la fecha. Se trata de un pez prehistórico con un antigüedad de 380 millones de años. Es uno de los hallazgos más relevantes en relación a órganos blandos de animales antiguos y un avance significativo para el estudio de la evolución. 

El pez, perfectamente conservado dentro de una formación rocosa, y hallado en la región de Kimberley en Australia Occidental, contenía los restos de un corazón, hígado, estómago intestinos, según el registro de un escaneo a través de haces de neutrones y rayos X.  

El corazón pertenecía a un vertebrado de la especie gogonasus, comúnmente encontrados en la formación Gogo de Australia occidental. Los también clasificados como placodermos, fueron unos de los primeros peces en tener mandíbulas y dientes. Algunos podían llegar a medir de 10 a 15 centímetros, mientras que otros alcanzaban los nueve metros de largo

Según los hallazgos, estos peces primitivos acorazados tenía un corazón muy similar al del ser humano. Compuesto por una cámara superior e inferior. 

El investigador principal John Curtin y la profesora Kate Trinajstic, de la Escuela de Ciencias Moleculares y de la Vida de la Universidad de Curtin y el Museo de Australia Occidental, destacaron los detalles de este hallazgo, pues es poco común encontrar los tejidos blandos de algunas especies y aún más raro encontrar su registro y preservación en 3D sobre estas formaciones. 

Kate Trinajstic / Science

“Como paleontólogo que ha estudiado fósiles durante más de 20 años, me sorprendió mucho encontrar un corazón en 3D bellamente conservado en un ancestro de 380 millones de años”, dijo el profesor Trinajstic.

“A menudo se piensa en la evolución como una serie de pequeños pasos, pero estos antiguos fósiles sugieren que hubo un salto mayor entre los vertebrados sin mandíbula y con mandíbula", explicó el científico. 

Algunos detalles sugieren que el órgano bombeador de estos peces estaban mucho más adelante dentro de su cuerpo, que el de otros ejemplares más viejos. "Literalmente tienen el corazón en la boca y debajo de las branquias, al igual que los tiburones de hoy en día”, agregó Kate

Según el estudio, los científicos sugieren que esta ubicación está vinculada al desarrollo de los peces de esta especie y que esto abrió paso al desarrollo de los pulmones dentro de su línea evolutiva

"Muchas de las cosas que ves las tenemos en nuestros propios cuerpos; mandíbulas y dientes, por ejemplo", señaló Zerina Johanson del Museo de Historia Natural de Londres, líder mundial en placodermos y colaborador en el equipo de la profesora Trinajstic

"Vemos la primera aparición de las aletas delanteras y las aletas en la parte posterior, que eventualmente se convirtieron en nuestros brazos y piernas", agregó. "Hemos visto muchas cosas en estos placodermos que hoy vemos en nuestra propia evolución, como el cuello, la forma y disposición del corazón y su posición en el cuerpo".